Aunque suene a cuento chino los hombres también tienen clítoris y saber estimularlo es igual de importante que saber dar placer a una mujer a través de esta delicada zona.
Ellos, que tanto se preocupan en dar placer a las mujeres estimulando su clítoris, desconocen la existencia de esta zona en su cuerpo.
El clítoris masculino se encuentra a cierta profundidad dentro del glande, debajo del pliegue que algunos hombres tienen y en la cara inferior del pene. El camino para llegar a él es algo más difícil que en las mujeres, pero vale la pena dedicar un poco de tiempo a la exploración de los cuerpos.
Como en las féminas, el clítoris masculino es una fuente de placer muy alta y por tanto no debemos olvidarla, sino incluirla en los juegos preliminares a través de un masaje que te detallamos paso a paso. ¡Apunta!
Antes de empezar con el masaje es necesario que ambos os relajéis y dediquéis un poco de tiempo a crear el ambiente adecuado.
Pasó uno: extender lubricante (o aceite para masaje) en el pene de tu pareja y acariciarlo para empezar la estimulación.
Pasó dos: coloca el pene sobre el vientre de él, para que la parte inferior quede expuesta y sea más fácil acceder a ella. Luego presiona con la punta del dedo un pequeño bulto que une la cara inferior del pene con el glande. Masajea esta zona hasta que encuentres el punto más placentero para él.
Paso tres: Da unos golpecitos en esta zona. Puedes utilizar la punta de los dedos, pero con cuidado.
Paso cuatro: A continuación, coge el glande con los dedos pulgar e índice y hazlo girar sobre su eje. El dedo índice debe mantenerse sobre el clítoris.
Paso cinco: Ahora debes situar el borde del glande entre los dos índices para lo que necesitarás ambas manos. Frota el pene de delante hacía atrás, como en una masturbación común.
Paso seis: En esta posición, vuelve a colocar el pene sobre el vientre de él y frota su clítoris con ayuda de un vibrador. Tras este paso se precipita la eyaculación y ¡voilà! haz descubierto una nueva práctica sexual.
De este modo puedes conseguir una eyaculación previa al coito o simplemente jugar para que luego sea él el que te recompense por haber descubierto esa zona de placer que él desconocía.
Haz un intercambio de masajes estimulando varias zonas erógenas a la vez, verás como te lo agradece.
Productos Recomendados para este masaje.
Ellos, que tanto se preocupan en dar placer a las mujeres estimulando su clítoris, desconocen la existencia de esta zona en su cuerpo.
El clítoris masculino se encuentra a cierta profundidad dentro del glande, debajo del pliegue que algunos hombres tienen y en la cara inferior del pene. El camino para llegar a él es algo más difícil que en las mujeres, pero vale la pena dedicar un poco de tiempo a la exploración de los cuerpos.
Como en las féminas, el clítoris masculino es una fuente de placer muy alta y por tanto no debemos olvidarla, sino incluirla en los juegos preliminares a través de un masaje que te detallamos paso a paso. ¡Apunta!
Antes de empezar con el masaje es necesario que ambos os relajéis y dediquéis un poco de tiempo a crear el ambiente adecuado.
Pasó uno: extender lubricante (o aceite para masaje) en el pene de tu pareja y acariciarlo para empezar la estimulación.
Pasó dos: coloca el pene sobre el vientre de él, para que la parte inferior quede expuesta y sea más fácil acceder a ella. Luego presiona con la punta del dedo un pequeño bulto que une la cara inferior del pene con el glande. Masajea esta zona hasta que encuentres el punto más placentero para él.
Paso tres: Da unos golpecitos en esta zona. Puedes utilizar la punta de los dedos, pero con cuidado.
Paso cuatro: A continuación, coge el glande con los dedos pulgar e índice y hazlo girar sobre su eje. El dedo índice debe mantenerse sobre el clítoris.
Paso cinco: Ahora debes situar el borde del glande entre los dos índices para lo que necesitarás ambas manos. Frota el pene de delante hacía atrás, como en una masturbación común.
Paso seis: En esta posición, vuelve a colocar el pene sobre el vientre de él y frota su clítoris con ayuda de un vibrador. Tras este paso se precipita la eyaculación y ¡voilà! haz descubierto una nueva práctica sexual.
De este modo puedes conseguir una eyaculación previa al coito o simplemente jugar para que luego sea él el que te recompense por haber descubierto esa zona de placer que él desconocía.
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