lunes, 27 de septiembre de 2010

Las zonas más sensibles de la mujer I


Conocidas también como zonas erógenas, son las partes del cuerpo  más sensibles donde generando una buena estimulación, se lograra generar un alto grado de sexualidad. Estas zonas, son muy importantes conocerlas al momento de estar con nuestra pareja, ya que no siempre la vagina, los senos y la cola, son las únicas zonas erógenas para poner ardiente a la mujer, y no estoy diciendo que estas zonas no sean las más importantes, pero es bueno experimentar algo distinto y salir de la monotonía.

Comencemos entonces, en el día de hoy con las primeras 4 zonas:



1)    Pies
Esta zona, sirve tanto para comenzar una relación sexual como para ayudar a nuestra pareja a relajarse después de un día movido, el masajear los pies de nuestra pareja puede generar grandes cosas al momento preliminar de la relación sexual. Para ellos, es de mucha utilidad los aceites de masajeo,  cremas de manos o algún tipo de liquido viscoso, con muy buen aroma y que nos ayude a deslizar las manos entre los dedos de los pies. Algo para tener en cuenta al momento de frotar los pies de nuestra pareja, es que cuando tengamos los pies en nuestras manos, el masaje tiene que poseer una presión agradable, sin llegar al punto de lastimar, ya que si lo hacemos con suavidad, puede generar cosquillas, algo que no nos puede resultar gracioso en ese momento. Una de las cosas que deben tener  en cuenta, la persona a la que le van a hacer el masaje, es tener con anterioridad los pies limpios,  pues después de un día fuerte de trabajo, el sudor pueden generar mal olor, y las plantas de los pies llevar consigo suciedad, algo que de pronto puede resultarle muy incomodo a nuestra pareja, sobre todo, si él decide hacerte un masajes con chocolate, o con leche condensada y tenga pensado no solo utilizar sus manos, sino también  su boca.


2)  Tobillos
Si solo se desea comenzar una estimulación relajante, o generar un ambiente más sexual, acariciar los tobillos con un poco de aceite y sensualidad, puede aumentar la temperatura gradualmente. Coloquen los tobillos de ella en sus hombros y frótenlos con masajes fuertes, de forma que cada pierna quede en cada uno de nuestros hombros y en el momento en que queramos girar la cabeza para cualquiera de los dos lados, podamos tener cerca los tobillos de ella y generar cierto estímulos con nuestra boca. Una posición cómoda, es mientras la mujer esta acostada en la cama, el hombre delante de ella arrodillado tome sus piernas y las ponga en sus hombros, y son las manos hacia atrás, acaricie sus tobillos, así los besos pueden bajar a medida que se pone el ambiente más caliente. Nunca se deben usar los dientes.

3 )   Detrás de las rodillas
Mientras ella se encuentra acostada boca abajo, comienza un masaje suave desde los talones, hasta llegar a la parte detrás de las rodillas, donde podrás besarla y acariciarla. Este área es muy sensible a los toques suaves, así que no se recomienda hacer mucha fuerza, ni mordisquear. Juega con los movimientos de la lengua.

4)    Muslos
Si se encuentran desnudos o con poca ropa, abre sus piernas y con delicadeza y suavidad, acaricia el interior y el exterior de sus muslos, con tus dedos y labios. Por unos minutos mantente lejos de la vagina, y ve acercándote suavemente. El consejo: Pase la lengua suavemente por toda el área ubicada al lado de los labios mayores de la vagina, y luego termine en su muslo superior con un lamido a presión.

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